Ambos parques de béisbol tienen sus historias que contar.
Por Iván Ottenwalder
|
Estadio Tetelo Vargas. |
De las provincias San Pedro de Macorís y La Romana se puede decir que son las dos principales industrias azucareras de la región Este, y no desde ahora. También se sabe que son urbes donde se respira aire de béisbol.
Todo dominicano conocedor del juego pelota, como se le llama al pasatiempo del béisbol, tiene conocimiento de quiénes son las Estrellas Orientales de San Pedro de Macorís y los Toros del Este, de La Romana. Por ende saben cuales son los estadios Tetelo Vargas y Francisco Micheli. Este capítulo abordará la historia de estos dos estadios de béisbol, de modo que, lo que respecte a los conjuntos Estrellas y Toros será asunto para otro tema.
Todo estadio, de la disciplina deportiva que sea, tiene su historia, sus vivencias, cuyos protagonistas lógicamente son los equipos.
En época muerta, mejor dicho, donde no hay temporada de béisbol, gran parte de estos parques, propiedad del Gobierno, suelen ser usados para otro tipo de actividades, sobre todo artísticas. En el caso del Tetelo Vargas es así, por ser estatal, pero no en el de La Romana, propiedad de un emporio privado, como es el Central Romana Corporation.
Estadio Tetelo Vargas; Antecedentes
En honor a la verdad, San Pedro de Macorís, meca del béisbol dominicano, merecía un estadio moderno desde hacía mucho tiempo. Por eso, el 24 de octubre de 1959 se inaugura el Estadio Tetelo Vargas que, en primera instancia, se denominó Ramfis Trujillo, en honor al hijo del dictador Rafael Leonidas Trujillo.
Es interesante conocer los antecedentes del Tetelo Vargas para que la gente se haga una idea dónde era que se jugaba pelota en San Pedro antes de 1959.
El béisbol llega a San Pedro de Macorís en 1886 traído por cubanos que vinieron en el buque María Herrera. La tripulación de aquel barco, dividida en dos escuadras, efectuaron un partido en las cercanías de la playa de Pita y, una vez finalizado el encuentro, regalaron a los lugareños sus bates, guantes y pelotas. Esa fecha se recuerda acaeció un 25 de septiembre de 1886. Cada escuadra se autodenominó con un nombre: una con el de Santiago de Cuba y la otra con el de Angelina.
El primer parque de béisbol petromacorisano (primera década del siglo XX) estuvo ubicado en los terrenos de la Escuela Normal, hoy Liceo Secundario José Joaquín Pérez. Un play rudimentario cercado con alambres de púas y mallas de gallinero.
Más tarde, para el decenio de los 20 del siglo XX, ya cuando existían las Estrellas Orientales, se jugaba en el Oriente Park, que no era más que un hipódromo, cuyo terreno fue habilitado para el béisbol. Ese estadio estaba situado en lo que hoy es la barriada de Restauración.
En ese hipódromo fue que las Estrellas Orientales ganaron su primer campeonato de la etapa amateur del béisbol, en 1936, así como su primero de la era moderna, en el verano de 1954.
Ya se dijo que el 24 de octubre de 1959 se inauguró el estadio de béisbol Ramfis Trujillo (hoy Tetelo Vargas), el más moderno que conocería San Pedro de Macorís, y el único con que cuenta hoy día en pleno siglo XXI.
En síntesis, en el Tetelo Vargas el equipo local Estrellas de Oriente ha vivido momentos de alegrías y tristezas. En ese parque se festejó el campeonato de la temporada 1967-68, último ganado por el equipo petromacorisano. Se perdieron las finales de la temporada 1974-75, de 1986-87, de 1991-92, 1995-96 y se veló el cadáver del jugador José Oliva, fallecido en accidente automovilístico en 1997.
El Francisco Micheli, una historia excitante
La razón que tuvo la compañía Gulf and Western Americas para fundar el parque de béisbol Romana (hoy Francisco Micheli) estuvo basada en la contribución por el desarrollo del deporte en el país y, naturalmente, por la comunidad romanense.
|
Estadio Francisco Micheli |
La fecha de inauguración de este estadio fue el 19 de noviembre de 1979. El presidente de entonces, Don Antonio Guzmán, lanzó la primera bola.
Para el año 1979 se produjo una situación suis géneris digna de contar: el huracán David hizo terribles estragos en San Pedro de Macorís, afectando en gran medida al parque Tetelo Vargas. Por mutuo acuerdo entre los directivos de las Estrellas Orientales y de la administración del estadio Romana, se decidió que 15 de los 30 partidos que se jugarían en el estadio de Macorís, se escenificaran en el nuevo parque romanense.
Aquella noche del 19 de noviembre de 1979 fue espléndida. En un partido entre los Tigres del Licey visitando a las Estrellas Orientales, Ricardo Carty (Rico) le conectó un cuadrangular al pitcher oriental Randy Martz, y ese fue el primer jonrón que se disparó en la historia de ese parque en torneo de béisbol otoño- invernal alguno. Para la época, los Toros del Este no existían aún como franquicia.
Licey campeón en La Romana
Siguiendo el hilo de la campaña 1979-80 es justo recordar que los Tigres del Licey escribieron la historia al ser el primer conjunto del béisbol profesional en coronarse campeón en el parque Romana, el 28 de enero de 1980, venciendo a las Estrellas de Oriente. Esa fue la final en que se recuerda que los fans liceístas vinieron en caravana (festejando) desde La Romana hasta Santo Domingo.
Llegan los Toros
Pero el momento del verdadero esplendor de este parque aún no había llegado. Ocurriría el 20 de octubre de 1983 con el debut de los Azucareros del Este (también llamados Toros). En ese primer desafío se enfrentaron ante los Leones del Escogido. Más de 8 mil fanáticos colmaron el estadio y el gobernador provincial, Jean Giraldi, tuvo a cargo las palabras de honor.
Dos años más tarde, temporada 1984-85, los Toros del Este clasificaron a la serie final por primera vez en su historia, una gran proeza para un equipo tan joven en el béisbol dominicano. Perdieron ante los Tigres del Licey en cinco partidos (4-1).
Esa fue la segunda vez en la historia que el Francisco Micheli fue escenario de una serie final.
En la campaña 1992-93 los Toros volverían a disputar otra gran final, perdiendo esta vez ante la Águilas Cibaeñas (4-2). El sexto partido de esa serie, el que coronó a las Águilas, se disputó en La Romana y el score final fue 3 vueltas a 2.
En la temporada 1994-95 el estadio Micheli vivió el momento más inolvidable de su historia cuando, el lunes 30 de enero de 1995, se coronaron campeones nacionales por primera vez. Dispusieron de las Águilas Cibaeñas en el sexto juego de la serie final, dos vueltas por cero.
Este fue, sin dudas, el momento de más pasión, furor y éxtasis vivido en el estadio romanense, desde sus orígenes en 1979 hasta la etapa actual, año 2009.