En esta oportunidad solo acudimos tres competidores: Guillermo, Lumis e Iván Ottenwalder, autor de esta crónica.
Por Iván Ottenwalder
Lumis (izq) e Iván Ottenwalder. |
Los pocos integrantes que quedamos del scrabble
dominicano, que regularmente vivimos más dispersos que cohesionados,
hemos vuelto a reunirnos. La última vez se produjo en octubre de 2018,
en casa de Ludmila Alba, en una jornada bastante corta donde apenas se
pudieron jugar dos partidas: Guillermo Bodden contra mí y Wagner Méndez frente a Lumis
Alba. Transcurrieron un poco más cuatro meses para que los viejos
amigos nos viéramos nuevamente las caras. El escenario fue el mismo: el
lujoso apartamento de la anfitriona, con la única diferencia de que en
esta oportunidad solo acudimos tres competidores: Guillermo, Lumis e Iván Ottenwalder, autor de esta crónica.
Guillermo Bodden. |
La contienda arrancó casi a las ocho de la noche con un match entre Lumis y yo. La victoria fue para mi rival, 439- 332. Sus scrabbles fueron DESOLLADO (69) y AMENICES (89) y sus vocablos
cortos más valiosos OXEADA (44), ESCARZA (48), CUATE (33) y LAZO (26).
De mi parte solo pude conseguir una bonificación con IDEARIOS (61) y
algunas palabras de altos puntajes como JO (43), LINO (34), AÑIL (27),
AGARREN (45) y AQUEJO (34). Para ser franco ninguno de los dos contamos
con la generosidad de la bolsa, ya que en la mayoría de los casos
tuvimos que apelar a jugadas de poca monta con el objetivo de equilibrar
y mejorar los atriles. De todos modos, hubo una ganadora, y fue la
dueña de casa.
Partida entre Bodden y yo. |
En el segundo encuentro nos medimos Bodden
y yo en un desafío que inició bastante reñido, al menos en los primeros
cuatro turnos, pero que luego fue tornándose a mi favor hasta
finalmente llevarme la victoria. Mi adversario se vio dominando 136 –
113, gracias a par de bonificaciones como LASQUEN (63) y REINASE (68),
cuando la partida aún era muy joven. Pero su suerte cambió para mal
cuando tomé la delantera, 199 – 136, con CORREARAS (86) y dos turnos más
tarde cortesía de EMPALAIS (80), poniendo el score
299 – 192. El oponente no daba su brazo a torcer y más tarde amagó con
DESEADOR (77), acercándose en la pizarra 287- 355. Después con MULLÍ
(26), 313 – 362, pero el balde de agua fría vino cuando colgué ACEITARÉ,
de 61 puntos, y me alejé 423 – 313. Aún así el rival no estaba muerto, y con un impactante AJ de 50 tantos acortó
diferencia, 363- 423. Mi respuesta fue BOCÓN (29) y me despegué 452
–363. El resto fueron vocablos de pírricos puntajes que en nada
alteraron mi proyección ganadora. El marcador final quedó 475 contra
389.
Mis scrabbles
fueron cuatro: LAXASTE (85), CORREARAS (86), EMPALAIS (80) y ACEITARÉ
(61). Mientras que las cortas que más me puntuaron estuvieron en PEZ
(28), REYA (28) y BOCÓN (29). Por Guillermo hubo tres bonus (LASQUEN de
63, REINASE de 68 y DESEADOR de 77) y sus cortas más valiosas fueron
NUBLE (32), RUMOR (24), MULLÍ (26) y AJ (50).
Partida entre Bodden y Lumis. |
Lumis vuelve y gana
El último match lo contendieron Lumis Alba y Guillermo Bodden.
Ambos rivales solo llevaron los puntajes en la hoja de planilla, pero
no anotaron las palabras con las cuales puntuaron. La victoria fue para
la anfitriona, 534 – 450, con cuatro scrabbles. Por el derrotado también hubo cuatro bingos.
Al finalizar la jornada escrablera
no se definió la próxima fecha de encuentro. La dueña de casa explicó
que viajaría a los Estados Unidos de América y que lo más probable fuese
que nos juntemos nuevamente para marzo.
Estadísticas de la jornada
Ludmila Alba: 2 victorias y 0 revés (2-0)
Iván Ottenwalder: 1 victoria y un revés (1-1)
Guillermo Bodden: 0 victorias y 2 reveses (0-2)
Promedio de puntos por partida
Ludmila Alba: 486.5
Guillermo Bodden: 419.5
Iván Ottenwalder: 403.5
Promedio de scrabbles por partida
Guillermo Bodden: 3.5
Ludmila Alba: 3.0
Iván Ottenwalder: 2.5